Obra colectiva: Doña Javiera. Peña folklórica (1979)

Durante la dictadura cívico-militar chilena  las peñas folklóricas se transformaron en un verdadero símbolo de la resistencia; un espacio donde artistas y público se reunían para reafirmar que no todo estaba perdido, que era posible sobreponerse a la oscura noche que se cernía sobre el país. Una de las primeras y más emblemáticas fue la peña Doña Javiera, creada por el músico, escritor y gestor cultural Nano Acevedo. Creada en julio de 1975, estuvo ubicada primero en el restaurant Antofagasta de calle Mac Iver al llegar a Monjitas, y luego fue trasladada al interior del restaurant El Mundo, frente al teatro Caupolicán, donde se mantuvo hasta 1980. En este espacio, se dieron cita muchos de los artistas que se quedaron en Chile, resistiendo, manteniendo viva la creación cultural y el espíritu de lucha.  Entre ellos estuvieron: Margot Loyola, Gabriela Pizarro, Lázaro Salgado, Illapu, Barroco Andino, Ortiga, Aquelarre, Capri, Pedro Yáñez, Osvaldo Torres, Natacha Jorquera, Isabel Aldunate, Alfredo Labbé, Mario Fontana, Leo Vallejos, Dúo Semilla, Eduardo Peralta, Claudia Céspedes, Carlos Arriagada, Sergio Araya, Grupo “Aymará”, Alejandro Masmar, Checo Catalán, Mario Lanas, Daniel Tillería, Álvaro González, Guillermo Vega, Jorge Cartes, Rolando Escobar, Marcela Morena, Cristian Cáceres, y muchos otros.

El año 1979, Nano Acevedo produjo este disco, grabado en los estudios Sonotec, que reunió a algunos de los artistas que se presentaban en La Javiera, el cual fue publicado por el sello Alerce con el número de serie ALP 243. La dirección artística estuvo a cargo de Carlos Necochea, y el diseño gráfico pertenece a P. Andrades, O. Rojas y V. Larrea.

Dice en la contraportada del LP:

Durante cuatro años nuestra voz se ha escuchado en todos los escenarios que nos han sido posible: un «Caupolicán» repleto aplaudiendo el mensaje de sus cantores; un minúsculo tablado en el corazón de los barrios obreros. Regidos por una actitud soberana y constante, nuestra familia de artistas populares recoge la enseñanza de sus mayores y aplica en terreno su legado macizo y generoso: El arte para todos.

La historia no admite tergiversaciones cuando se trabaja a la luz del dia y con amor por lo que nos pertenece. Por lo tanto escrito está, lo de nuestros afanes y logros, como también nuestras debilidades y errores. Solo hemos pretendido crear, en base a realidades y con ese mágico secreto, que solamente alcanzamos a rasguñar, quienes admitimos como forma de vida, única y absoluta, la poesía, la música, el canto.

Este disco recoge, algo del material que hemos conseguido caminando en todo este tiempo, que no se puede medir en horas, pues cada minuto de asombro o temblor, es ajeno a estas dimensiones.

Solo quisiéramos, que junto a los sonidos, maderas y retratos, con los cuales construimos este documento musical, el auditor percibiera el rostro espiritual de sus actores y el marco torrencial donde fueron labradas estas piezas, sin que estuviese ausente para unos y otros, la quemadura a flor de piel, la soledad de a veces, el maravilloso regreso de las cosas.

NANO ACEVEDO, 26 de marzo de 1979

Contenido:

  1. Mi país [Leo Vallejos] (3:36)
  2. Marcha Huayño [Del folklore] (2:10)
  3. Tango [Astor Piazzola] (4:57)
  4. Hombre de arcilla [Eduardo Díaz – Jorge Venegas – Donald Silva] (4:05)
  5. En casa de una mujer llamada María [Nano Acevedo] (3:15)
  6. Estudiando el invierrno [Nano Acevedo] (3:18)
  7. Tu nombre me hará llorar [Freddy Albarracín] (3:01)
  8. Desplazados [Juan Bustamante] (2:16)
  9. América nuestra [Carlos Roa] (4:05)
  10. Romance del otro Santiago [Nano Acevedo] (5:33)

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1 comentario en «Obra colectiva: Doña Javiera. Peña folklórica (1979)»

  1. Fui parte del elenco de la Peña Doña Javiera, trabajámos duro para llevar el canto a lugares donde los pobladores estaban abandonados a su suerte. Y allí estaba el canto, las danzas, la poesía y el mensaje firme y claro del Nano Acevedo y todo el elenco de la doña Javiera. Éramos muy jóvenes, osados y desafiábamos al tirano con nuestro arte. Habría que rescatar la obra de Nano Acevedo, militante del canto y de la cultura. Hay toda una nueva generación de chilenos que no saben qué pasó y qué se hizo durante ese período negro de nuestra historia.

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