EP de cuatro canciones de la cantora mexicana Judith Reyes publicado en 1967. Todos los temas pertenecen en letra y música a Judith.
Dice en el interior del disco:
Vuela la lírica inspiración popular y en la voz y la palabra de Judith Reyes encuentra su máxima expresión histórica, para manifestarse musicalmente a los pueblos oprimidos que luchan y cantan; es el canto de la esperanza que ha de convertirse el día de mañana en clarinada de triunfo.
Este nuevo disco de Judith Reyes nos permite apreciar su constante superación musical e ideológica y al recordar aquel inolvidable long play en el que entonara canciones populares de México y canciones revolucionarias de su propia inspiración, no puede uno sino sentir tristeza de que este último disco contenga solamente cuatro de sus últimas canciones, mas el adelanto artístico y la radicalización de sus conceptos compensan en mucho la brevedad de esta nueva aparición en el acetato.
Judith Reyes está presente en todas las luchas de nuestro pueblo y así en su REBELDÍA RURAL, nos recuerda que uno de los principales problemas de nuestra actualidad, es la carencia de tierras que sufre el hombre del campo, y si en la misma REBELDÍA RURAL puede cantar dolida: “y a punta de bayonetas me vaciaron los morrales” no lo hace hablando “de oídas” sino narrando sus propias experiencias de lucha a lado de los campesinos de Chihuahua.
Sin duda alguna, esta PALOMA DE LA PAZ, va a molestar a aquellos que piensan que amar la paz es permanecer en la indolencia y también van a decir, sin duda alguna, que esta PALOMA DE LA PAZ es una paloma agresiva y virulenta; pero hay que recordar, que Judith Reyes no es una cancionera de la “nueva ola progresista” que piensa enriquecerse a base de la canción de “protesta social” y que en forma tímida espera que la paz llegue, mientras que lo que llega es “la bandera ensangrentada de los gringos”, a destruir la paz, esa paz ansiada por todos los pueblos pero que sin duda alguna no se va a conseguir con lamentos cadenciosos a “contra tiempo jazzista”.
En estas canciones de Judith Reyes, también campea la ironía y el clásico sarcasmo mexicano, por eso en el huapango que a manera de “pregones” conocemos como AQUÍ ESTA EL CHE y que sirve de presentación a este disco, nos hace sonreír y frotamos las manos de gusto al escuchar este ingenioso juego de palabras que nos dice que el Che Guevara está en todos los revolucionarios del mundo y desde luego, en la misma Judith Reyes con su guitarra, que ahora sí nos permite identificarla no como una cancionera de “protesta social” sino como una auténtica cantante revolucionaria.
Y para finalizar; nuevamente toda la ironía mexicana que inmortalizó en sus canciones a tantos autores anónimos en las luchas revolucionarias que registra nuestra historia. La Cama de Piedra, de la época colonial; la Pasadita del robo yanqui del 47; Adiós Mamá Carlota, de la intervención francesa; La Cucaracha, de la Revolución de 1910, y tantas otras que conocemos y gustamos.
La ironía y el sarcasmo característico de nuestra mexicanidad que en la música clásica inmortalizara el genial compositor Silvestre Revueltas, esté presente en las coplas al Distrito-Federal y les recuerda a esos “gorilas”, los granaderos, que el pueblo jamás olvidará que ahora lo golpean y así lo dice Judith Reyes con ira revolucionaria en una de sus coplas “Ojo con los granaderos, cuando empiecen a tirar, ora pueden darse gusto, pero no les va a durar”.
Contenido:
- Aquí está el Che [Judith Reyes] (3:05)
- Paloma de la paz [Judith Reyes] (2:50)
- Rebeldía rural [Judith Reyes] (3:55)
- Los granaderos [Judith Reyes] (4:18)
el che vive carajo!!! gracias a todos los que lo recuerdan y perpetuan mediante poemas y canciones.
TU LUCHA ES ETERNA
TU ENTRAÑABLE TRANSPARENCIA DE TU QUERIDA PRESENCIA COMANDANTE CHE GUEVARA….. PATRIA O MUERTE, VENCEREMOS.