Cuarto álbum de estudio de Patricio Manns, publicado por el sello CBS en 1969 (123.001). Todos los temas pertenecen en letra y música a Patricio Manns, excepto: El fuego que consume y Tenerte morena muerte, en que comparte autoría con Edmundo Vásquez; y Pañuelo blanco, canción del folklore recopilada por Susy y Patricia Rojas.
Acompañan a Manns en la interpretación de este disco: el conjunto Los Libertadores, y Valentín Trujillo y conjunto.
El año 1983 el sello Star Sound de Chile, reeditó este álbum en formato cassette, eliminando la canción «Pañuelo blanco». Esto ha llevado a que la mayoría de los sitios de internet que lo reseñan incurran en el error de indicar que sólo incluye 11 tracks. En Perrerac lo ofrecemos completo, con las 12 canciones que componían el LP original.
Dice en la contraportada del LP:
Voy a comenzar citando textualmente lo presentación que el editor hace de Patricio Manns en la contracubierta de su laureada novela «DE NOCHE SOBRE EL RASTRO»: «Caso poco corriente el de este escritor, nacido en Nacimiento, en 1937, que nunca hizo estudios secundarios y que ha sido sucesivamente, desde los dieciséis años, minero del carbón, estibador, navegante a contrata, mecánico de automóviles, vendedor de libros, comerciante de ferias libres, camionero, periodista, libretista de radio y televisión, y que conquistó súbitamente hace un par de años, un sitial destacado en el campo de la actividad musical como cantante, autor y compositor de motivos folklóricos. A las letras no llega de improviso: tiene otras tres novelas inéditas y una veintena de cuentos, y ha obtenido galardones en diversos torneos literarios. «DE NOCHE SOBRE EL RASTRO» es, según sus propias palabras, “un acezante examen del problema de la frustración”. Por su tensión dramática y autenticidad, y por el acertado manejo de las técnicas narrativas del relato contemporáneo se inscribe en un nivel relevante de la novelística chilena joven.”
Este Patricio Manns es el mismo que ustedes tienen ahora en sus manos, en un segundo larga duración preparado para C.B.S. bajo el título genérico de «LA HORA FINAL».
Yo quisiera destacar que en muy contadas ocasiones se produce el fenómeno artístico que encarna este muchacho. No es un gran cantante. No es un ejecutante sobresaliente. Sin embargo, hay en cada uno de sus trabajos aquello secreto que llama a la meditación, que conmueve profundamente nuestra sensibilidad, y, lo que es más Importante, que toca en lo hondo el corazón receptivo de los pueblos. De todos los pueblos. Porque el impacto ha sido igual en sus presentaciones en América y en sus enfrentamientos con los más diversos públicos de Europa: un mismo sobrecogido silencio recibe sus palabras y su voz.
¿En qué consiste, pues, el fenómeno? Tal vez una buena explicación se esconda en cada una de estas doce canciones. Desde los temas que ya tienen el carácter de clásicos, a tres años de su aparición, como el célebre «Arriba en la cordillera», la canción que marcó para siempre un hito insuperable en los comienzos de la nueva canción chilena; ese chispeante estilo, «El andariego», de dulce tono y melancólico texto: el vital y fragoroso empuje de «Los mares vacíos», que recoge el corazón como una ola cargada de sal y lo asesta contra las rocas de la memoria. A todos estos temas se unen las creaciones recientes: escuchen con atención por ejemplo, «Elegía sin nombre», de una belleza y una fuerza pocas veces palpada en las creaciones musicales de la tristeza americana; también «La gaviota», a nuestro juicio uno de los temas más bellos y logrados que hayamos oído nunca en la canción de raigambre folklórica; y en un lugar absolutamente aparte, «La imposible», que coloca a su autor entre los verdaderos poetas del continente. Y la sorprendente temática de «El compañero», canción de arreo ruda, violenta, acongojante como anécdota, sorpresiva y perturbadora como final, una verdadera obra maestra.
Para los grandes públicos, el principal escollo que ofrecen las creaciones de Patricio Manns es una aparente oscuridad inicial. Sólo es posible penetrar en el misterio torrencial de estos temas tras una audición atenta y una cabal comprensión del todo que ellos constituyen en sí mismos, porque son canciones destinadas a quedar sonando en el alma de los pueblos para los cuales fueron escritas y para los cuales se cantan. De plano ha sido eliminado el recurso fácil, lo chabacano, lo oportuno, lo de moda, el lugar común, el efecto simplista y barato. Todas ellas han sido elaboradas pacientemente, sujetas a un plan de trabajo riguroso, a una voluntad de creación y, más que nada, a una capacidad genial que logra milagros de fondo y forma utilizando solamente los recursos propuestos por el folklore vasto y desconocido de Chile, una de cuyas muestras puras ofrece Patricio en su versión de «Pañuelo blanco».
Un trabajo inteligente refuerza estas grabaciones contando con la técnica admirable y los efectos vocales de un grupo juvenil chileno que pronto ha de saltar fronteras enarbolando su nombre: LOS LIBERTADORES.
Queda pues en vuestras manos este segundo aporte de Patricio Manns al conocimiento de la nueva canción de Chile.
Convendremos tras una audición atenta, que estamos en presencia de un verdadero fenómeno musical, cuyas posibilidades aún nos resultan completamente desconocidas, y que no exageramos un ápice en esta nota de presentación. Recibid a este muchacho que escribe con la hondura de un viejo, que canta con el corazón desgarrado, que impone su presencia roja y negra desde el escenario y arranca lágrimas y ovaciones interminables. Es Patricio Manns el que ahora y para siempre se queda en un rincón exclusivo de vuestra sensibilidad. Vibrad con él.
SAÚL SAN MARTIN
Canciones:
- La imposible [Patricio Manns] (4:18)
- El andariego [Patricio Manns] (2:27)
- El fuego que consume [Patricio Manns – Edmundo Vásquez] (3:52)
- Tenerte morena muerte [Patricio Manns – Edmundo Vásquez] (3:18)
- Voy a ver pasar los trenes [Patricio Manns] (1:51)
- Los mares vacíos [Patricio Manns] (3:26)
- La hora final [Patricio Manns] (3:51)
- La gaviota [Patricio Manns] (3:50)
- El compañero [Patricio Manns] (3:47)
- Elegía sin nombre [Patricio Manns] (3:57)
- Pañuelo blanco [Recop. Susy y Patricia Rojas] (1:56)
- Corazón de piedra negra [Patricio Manns] (3:04)
JP: muchas gracias, como siempre, ¿y, podrías, porfa, incluir los textos históricos, solapas de LP’s y otros que tú pones aquí, en el paquete de descarga, también?
y ¿dónde se puede escuchar? Aquí en esta página no se ve ningún enlace